Mi mejor artículo es el que no escribí pero hoy el fuselaje de este avión me pide palabras, me pide combustible para seguir volando pues al jugador de Pro Evolution Soccer le gusta soñar, y a los sueños, les gusta volar.
Todo es más complicado cuando en la cubierta de cabina pilotan los de siempre, los que nos han dado paladas de cal y paladas de arena por igual, que a decir verdad nadie sabe realmente si la buena es la de cal o la de arena, pero todos saben que entre una de cal y una de arena, tenemos asegurado algo bueno, y las cosas buenas de la vida, son buenas, y da igual no saber por qué algo es bueno si realmente, tenemos algo bueno. Y como decía, todo se complica cuando pilotan los de las turbulencias y microinfartos, los que nos hacen tener la máscara de oxígeno a mano porque tras la neblina no sabemos si vienen turbulencias o nos aparecerá una pista de baldosas doradas.
De todas formas, es era de Haters, y en estas circunstancias, Pes es blanco fácil. Esto es una realidad, no es victimismo y sí, las cosas se han podido hacer mejor o peor, pero a Pes siempre le tiran a dar desde hace 10 años, a morder y a pellizcar donde más duele, así que posiblemente haya llegado el momento de achicar agua de este barco de piratas errantes y 10 cañones de andanadas para mandar sobre estas aguas y de paso, querernos un poquito. Los demás podrán perder la ilusión, pero desde luego, no permitiré que nadie de este barco crea que no estamos navegando en la dirección correcta.
Pes 2017 es una evolución en parte lógica de lo que fue Pes 2016 y previamente Pes 2014 y 2015. Digo lógica porque siempre habrá quien crea que es un juego revolucionario o por el contrario que es una evolución demasiado leve. Yo, desde el sentido común, creo que es una evolución lógica en un juego anual, lo cual no quiere decir que esté del todo satisfecho ni que justifique ciertas decisiones de timón, pero la idea era no salirse del margen, y en ello estamos.
Pes 2017 sería mejor juego en otras circunstancias, desde luego. En otra era de menos polución gamer, no estaría tan machacado. Aquí se ha llevado palos hasta Uncharted 4. Imaginaos los que se ha podido llevar Pes.
Con otras circunstancias, con otro rival, estaría un escalafón más arriba en la valoración. Fifa es un mastodonte, y puede gustar más o menos, pero sigue siendo un mastodonte, mueve masas, y eso es innegable. Pes no batalla contra Fifa porque es una fragata contra un buque, pero que a nadie se le olvide que si alguien quiere un juego de fútbol, y elige Fifa, no elige Pes, luego existe un binomio raro de dilucidar pues Pes y Fifa van de la mano aunque tengan rumbos ligeramente distintos.
Lo que tengo claro es que Pro Evolution Soccer 2017 es, a su manera, un pequeño gran mastodonte, un bicho, un todoterreno.
Nos quejamos de que tiene pocos modos, pero te pones a trastear y entre Liga, Copa, Liga Master, My Club, Ser Leyenda, Amistosos, Vestíbulos, Temporadas, Entrenamiento…a ver si vamos a estar equivocados, y el problema no sea que hay pocos modos sino que no hemos llegado a encontrarlos todos.
Nos quejamos de la duración de muchos juegos pero si Pes tuviera control de horas, reventábamos el contador.
Nos quejamos de juegos repetitivos pero no hay dos partidos iguales en Pes. Que ojo, puede haber dos y tres partidos malos, pero incluso en esos partidos infectos, hay variedad, y como siempre digo, si me das dos tazas de mierda, que al menos no sea la misma mierda.
En Agosto afirmé tras probar la demo de Pes 2017 que se trataba del mejor Pro Evolution Soccer de la historia, me tacharon y me siguen tachando de loco, ahora bien, tienes dos opciones, creer que simplemente es un correcto Pes, o que estamos ante la mejor rúbrica de Konami con un juego de fútbol. Con el poder crítico que hoy tiene el gamer, el mejor Pes que recuerdes sería degollado. Ya no se perdona nada, y menos mal que por fortuna tengo sangre y memoria que encharca mi pecho para nadar a contracorriente y destapar la hojarasca que tapa la luz. No puedo permitir que creas que este es un mal juego, o que no tiene alma.
Volvemos a lo de siempre, al alma, al rumbo de partida de toda esta historia, a la magia de esa en la que nadie reconoce creer pero que todos saben está ahí. Si diseccionamos la magia, ésta deja de tener sentido. Cobra valor cuando somos capaces de ver magia y no truco, de ver la función recorrer frente a nuestros ojos y aplaudir hasta que el clack clack de nuestros huesos nos impiden oír lo que vemos.
Que esto va de carácter, de tener personalidad y jerarquía para decir ¡eh!, yo juego a Pes y podrás repetirme doscientas mil veces que es una basura de juego, pero debes saber que tu odio alimenta mi deseo por seguir disfrutando de su magia, pues si el mundo tuyo, el de las cosas tangibles, es así, desearé permanecer por muchos años en la idiosincrasia y humildad de la magia que tiene Pro Evolution Soccer, con sus carencias, sus debilidades, sus desplantes y sus citas frustradas, mas no dejaré de creer en lo que ayer me hizo volar y hoy me hace surcar viento en popa a toda vela este mar de odio y rencor camino a un nuevo paraíso.
Seguid, seguid empeñados en despiezar la magia, en desfragmentar lo que en su conjunto es un producto goloso. Acabaréis desmembrando vuestra ilusión, pero no hablo ya de Pro Evolution Soccer, hablo de la vida. Si tienes un día perfecto en el que has ligado con la conductora del autobús que te lleva al trabajo, tu mujer te ha dicho que vas a ser padre, tu equipo de fútbol favorito ha ganado, y al final del mismo lo único en lo que piensas es en que a las 8 de la mañana se te ha caído la cucharilla de café al suelo, habrás pasado de tener un día perfecto a tener un día en el que se te ha caído una cucharilla de café al suelo.
Seguid, seguid. Que para cuando os deis cuenta tendréis un corazón que será un simple tarro vacío de cristal de estos que venden en el supermercado con la menestra de verdura. Sabéis de qué tarro de cristal os hablo, y lo peor de todo es que os habéis imaginado con ese bote de cristal en el pecho. No estoy bromeando. Cuando una de las cosas que más te ilusiona en la vida te deja de ilusionar, pasas a tener un bote de cristal vacío en el pecho. Yo solamente estoy aquí para agujerearlo y dejar dentro la semilla del valor y de la personalidad, para que enciendas tu videoconsola, pongas Pro Evolution Soccer 2017 y sientas con un escalofrío que aún no. Que es pronto para dejar de creer en la vida.
Que yo también podría haber hecho un análisis esquematizado de Pes 2017, como hacen los análistas de cualquier web hoy en día.
Pero al jugador de Pes no se le disecciona este juego. Porque la magia no se disecciona. Simplemente se siente, o no se siente.
Solo una última cosa. Carácter. Que nadie te diga jamás que Pes 2017 es mal juego. Ni siquiera yo. Solamente tú tienes la llave de la ilusión. Que nunca se te olvide.
Carlos González Bravo.